Su papel en la conquista del sufragio femenino en España convirtió a Clara Campoamor en una figura indispensable en la historia de los derechos de las mujeres.
Si alguna vez te has preguntado por qué las mujeres en España tienen derecho al voto, debes conocer a Clara Campoamor. En un mundo donde las mujeres no tenían la oportunidad de alzar su voz en las urnas, Clara se destacó como una defensora incansable de la igualdad de género y una pionera en la conquista de los derechos fundamentales. El hecho de conseguir que el sufragio femenino llegara a España la hizo pasar a formar parte de las llamadas ‘sufragistas’, aquellas mujeres que lucharon por hacer realidad el voto femenino.
Retrato de la abogada, escritora y política Clara Campoamor. © EFE/lafototeca.com
Batalla por el sufragio femenino
En los años 30, en plena Segunda República, la abogada, escritora y política Clara Campoamor se encontró en medio de un debate crucial sobre el derecho al voto de las mujeres. En ese momento era diputada por el Partido Radical. Sí, era diputada pero, paradójicamente, no podía votar como sí hacían sus compañeros diputados.
Conseguir la igualdad de derechos electorales entre hombres y mujeres no fue una tarea fácil. Campoamor se enfrentó a oposición y críticas, incluso de su propio partido, y también de algunos sectores feministas. Fue el caso de la diputada Victoria Kent, del Partido Republicano Radical Socialista, que a pesar de defender la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, aún no veía que fuera el momento de instaurar el sufragio femenino. Campoamor persistió argumentando que esta igualdad en el derecho al voto era esencial para construir una sociedad más justa y equitativa.
Su discurso en las Cortes de la Segunda República el 1 de octubre de 1931, defendiendo el sufragio femenino, ha pasado a formar parte de la historia de España. "No tendréis nunca bastante tiempo para llorar al dejar al margen de la República a la mujer", dijo Campoamor al resto de diputados. Tras él, el resultado de la votación por aprobar el reconocimiento del derecho al voto para las mujeres fue de 161 votos a favor, 121 en contra y 188 abstenciones. De esta forma, se aprobaba el sufragio femenino en la nueva Constitución española de 1931. Al fin las mujeres pudieron ver reconocido su derecho al voto, al igual que cualquier hombre en España. Aquellas mayores de 23 años lo ejercieron por primera vez en las elecciones generales de 1933. Se daba así un paso de gigante hacia la igualdad.
La política y abogada Clara Campoamor en su despacho. © EFE/lafototeca.com
Inspiración para el futuro
La victoria en la lucha por el sufragio femenino fue solo una parte del legado de Clara Campoamor. Su valentía abrió el camino para las mujeres en la política y la sociedad. Hoy, le podemos agradecer que nos allanara el camino hacia la igualdad de género. Su legado nos inspira a seguir luchando por un mundo donde todas las personas, independientemente de su género, tengan las mismas oportunidades y derechos. Algunas de sus frases a favor de la igualdad, como las que destacamos a continuación, ya son parte de la historia:
Activistas defendiendo el feminismo. © IStock
Amnistía Internacional: Feminismo es igualdad
Como destacábamos anteriormente durante años, el derecho a voto estuvo limitado a la mitad de la población. Amnistía Internacional ha sido y es una defensora activa de la igualdad de género. La organización aboga por la igualdad de derechos para todas las personas, independientemente de su género, y trabaja para eliminar la discriminación y la violencia basada en el género en todo el mundo
Amnistía Internacional trabaja con sus investigaciones, campañas y denuncias, para que todas las mujeres y niñas del mundo puedan disfrutar de los todos los derechos humanos sin discriminación por el mero hecho de ser mujeres.
Aunque ha habido avances significativos, alzar la voz sigue siendo necesario para llegar a la igualdad de género, algo que aún no se ha alcanzado en ningún país del mundo.